La Biblioteca Nacional de España está situada en el número 20 del Paseo de Recoletos de Madrid, compartiendo edificio con el Museo Arqueológico Nacional. Es la principal biblioteca española, siendo el centro depositario del patrimonio bibliográfico español. Actualmente (2005) cuenta con un fondo bibliográfico de 17 millones de documentos, y tiene además una segunda sede en Alcalá de Henares.
Fue fundada con el título de Librería Real por el rey Felipe V en 1711, en la Casa del Tesoro, frontera a los Caños del Peral, y se abrió al público en marzo de 1712, con la doble función de hacer llegar el conocimiento a los ciudadanos y recoger las bibliotecas particulares de algunos nobles.
Sus primeros fondos bibliográficos fueron unas pocas colecciones que Felipe V había traído consigo desde Francia, junto a algunas colecciones que la Reina Madre guardaba en el antiguo Alcázar. La gran mayoría de las obras y los mejores volúmenes seguirían estando en manos de la Corona, en la Biblioteca Real que también mandó realizar y ordenar el mismo Rey. No obstante, por Real Cédula de 1716 se la concedió el privilegio de obtener un ejemplar de cuantos libros se editaran en España (como ahora con el depósito legal), así como se la reconocía el derecho de tanteo en las ventas de manuscritos, estampas, medallas y la adquisición de librerías particulares. Se publica la primera obra fruto del trabajo de la biblioteca en 1738 bajo el título de Bibliotheca Universal de la Polygraphia Española, realizada por Cristóbal Rodríguez. En 1761, Carlos III funda la Imprenta Real a cargo del bibliotecario mayor, liberando así a la institución de las tareas de edición y favoreciendo la multiplicación de obras. Además, se instituyó oficialmente su gobierno interior con el nombramiento de un bibliotecario mayor y otros bibliotecarios.
Los fondos de la biblioteca siguieron creciendo con la librería del cardenal Arquinto, que ordenó comprar Carlos III en Roma, y con los fondos que Carlos IV adquirió del señor Múzquiz, entonces embajador de Francia.
Durante el reinado de José I Bonaparte (1808-1813) y con motivo de la realización de las obras de la nueva plaza de Oriente, la Biblioteca fue trasladada a los claustros altos del Convento de la Santísima Trinidad de Religiosos Calzados, en la calle Atocha. Pero de nuevo en 1819, a petición de los frailes, fue traslada al entonces Ministerio de Marina, ubicado en la casa llamada de los Secretarios de Estado y de Despacho, también conocida como Palacio del Marqués de Grimaldi y como Palacio de Godoy, en la Plaza de la Marina Española. En 1826 Fernando VII compró unas casas en el número 4 de la Plaza de Oriente para instalar la Biblioteca y así evitar entorpecer el normal funcionamiento del Ministerio de Marina. En opinión de los críticos del siglo XIX estas casas no eran las más adecuadas para esta función, pues su insuficiencia impedía ordenar correcta y adecuadamente todos los fondos bibliográficos y dificultaba la exposición del museo de medallas y del gabinete de antigüedades que tenía la Biblioteca desde su fundación
Fotos.- Biblioteca Nacional